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La elección del filamento multifibras

Por Andrés Orts

 

Elegir un modelo de línea se vuelve cada día más difícil por la amplia oferta del mercado. Nos referimos a las líneas de pesca multifibra, herederas de los primeros fabricados en kevlar y dacrón, realizadas en polietileno. El resultado es un producto muy resistente y con un diámetro muy fino a la vez.

 

 
Lo primero que deberemos saber es cuándo cambiar de monofilamento a multifilamento -de nylon a fibra–. A igual diámetro, el monofilamento es mucho menos resistente que el trenzado. En según qué pesca los pescadores preferimos el multifilamento es por la falta de elasticidad en estas líneas, lo que les proporciona una sensibilidad extrema. Además transmite toda la energía del movimiento de la caña al señuelo y son resistentes a la abrasión. Asimismo, en el mismo carrete caben más metros de multifibra que de monofilamento, ya que el primero es más fino.

Lo más habitual, en cuanto al número de filamentos, solemos encontrar trenzados de cuatro filamentos en firmas como PowerPro, Spiderwire y Fireline y, de ocho filamentos en Avani, Varivas, Daiwa, etc. Por último se ha desarrollado una forma de trenzado especial, lo que se llama el trenzado de precisión de 12 filamentos. Este proceso consiste en trenzar las fibras de polietileno de forma más lenta, pero haciéndolo con más tensión. El resultado es un hilo mucho más redondo y uniforme y con una resistencia muy superior al resto de líneas trenzadas del mercado. Para valorar el cambio y mejora de estas líneas solo hay que ver su relación diámetro/resistencia. Por ejemplo, en el caso del Daiwa Saltiga x12 el diámetro más pequeño de 16/100 (0,16) tiene una resistencia de 30 lbs o 14 kilos. La mitad que en el caso del monofilamento. Algunas líneas multifibras llevan recubrimientos de diferentes tipos para que sean más compactas e incrementar su dureza. Con el paso del tiempo, cuando la línea está desgastada se pierde parte del recubrimiento original. Este hecho, lejos de estropear la línea provoca una mejora en el lanzado.
 

Algunas líneas multifibras llevan recubrimientos de diferentes tipos para que sean más compactas e incrementar su dureza.

 

A pesar de su resistencia a la abrasión, los fondos rocosos son el principal enemigo de estas líneas ya que al roce se cortan inmediatamente mucho antes que con el monofilamento. Es justo por eso que el terminal o leader siempre debe ser de nylon o fluorocarbono. Estas líneas se fabrican en un color o en varios colores por bobina, el hecho de colorear la línea cada 5 o 10 metros es para añadir una funcionalidad más a la línea, pues nos permite poder contar de manera eficaz la distancia a la que está nuestro señuelo simplemente controlando qué color está ante nosotros. Se trata de un dato muy práctico en disciplinas como el curricán o el jigging.

Otra ventaja fundamental de estas líneas es su facilidad de salida ante un lance de spinning, pues se consiguen lances mucho mayores. La línea, al ser más blanda y fina sale más rápido del carrete, ocurre exactamente lo mismo con la pesca del jigging. El jig baja infinitamente más rápido con una línea fina de trenzado polietileno que con una línea de nailon tradicional.

 
 

El hecho de colorear la línea cada 5 ó 10 metros es para añadir una funcionalidad más a la línea, ya que permite poder contar de manera la distancia a la que está nuestro señuelo simplemente controlando qué color está ante nosotros.

 
SOLUCIONES:
  • Para evitar que el multifibra se clave en el resto de trenzado que permanece enrollado en la bobina cuando se tira de la línea fuertemente o se efectúa una enérgica clavada al morder un pez el señuelo, cargaremos el carrete con mucha tensión desde el principio.
  • En el caso de formación de “pelucas”, especialmente cuando la línea no está bobinada los suficientemente tensa, o el carrete está demasiado cargado de línea y se realice un lance tenso, cargaremos el carrete de modo muy tenso sin llenarlo demasiado.
  • Algunos peces consiguen escaparse del anzuelo cuando están cerca del barco por la falta de elasticidad, pues esta línea produce un desgarro en la boca del pez. La solución está en emplear cañas blandas que amortigüen las embestidas y como muchos pescadores saben también es fundamental aflojar el freno cuando el pez está cerca del barco. Posiblemente el pez dé cabezazos al verse cerca del barco y la no elasticidad podría ser un problema.
  • El multifibras es muy visible en el agua, especialmente cuando ésta es clara. Esto no nos debe preocupar, pues el pez solo ve las últimas brazas cercanas al al señuelo y éstas deberán ser siempre transparentes, de nylon, de fluorocarbono o mixtas.
  • Estas líneas al ser tan resistentes podrían acabar cortando las anillas de una caña por el roce, de modo que es recomendable usar equipos de alta calidad con anillas de cerámica resistentes a las temperaturas 1200 ºC.
  • Cuando tenemos una gran picada, se da una salida explosiva de línea del carrete, sea con nylon o sea con estas líneas. Se deberá tener siempre en cuenta qué peligros reales conlleva manipular el carrete, es peligroso tocar la bobina para frenarla con los dedos pues literalmente quema. Estas líneas son capaces de cortar los dedos de la mano.
 
 
 
 
 
 
 
 
 



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